OSKO: SOBRE EL ELEISON 307 DE MONS. WILLIAMSON

EN TERAPIA INTENSIVA

OTRO MÁS QUE ESTÁ EN LA BÚSQUEDA DEL «PUNTO DE PARTIDA»

 Mons. Williamson 2

ELEISON 307:

UN SALVAVIDAS DE PLOMO

Desde algunos sitios PRO-WILLIAMSON se solicita y ofrece un Ramillete Espiritual, con motivo de cumplirse los 25 años de la consagración episcopal del Prelado inglés.

Loable y piadosa iniciativa.

Lamentablemente esto se ve opacado casi inmediatamente por el mismo Monseñor Williamson, quien apenas unas horas después publicó su ELEISON 307.

No podemos evitar hacer nuestros comentarios que, como se sabe, serán «desagradablemente inoportunos» para algunos, pero que serán consecuencia directa de las palabras de Monseñor Williamson, a cuya explícita letra y sus muy serias consecuencias nos remitimos.

Comentarios Eleison Número CCCVII (307)

1º de Junio de 2013

AUTORIDAD PARALIZADA

Un número de buenas almas desean que una Congregación sea fundada para reemplazar a la Fraternidad San Pío X. Pero, si bien comparto el temor de ellas que la FSPX está actualmente bien avanzada en el camino para inhabilitar su antiguamente gloriosa defensa de la Fe y vida católicas; y, si bien por consiguiente simpatizo con su deseo de ver otra Congregación como ella para tomar su lugar, no creo que ello sea posible y pienso que merece explicarse por qué.

Comentario: El primer párrafo del Eleison 307 comienza bien: No es posible concretar la fundación de una Congregación que tenga por fin reemplazar la FSSPX. El Obispo Williamson dice simpatizar con esa idea, pero no cree posible satisfacer tal inquietud y deseo de un cierto número de buenas almas. Ahora veamos las razones que da Monseñor Williamson:

Cuando en 1970 el Arzobispo Lefebvre escribió la carta constitucional de acuerdo con la cual la futura FSPX se fundaría y funcionaría, a saber sus Estatutos, fue para él de gran importancia obtener la aprobación oficial para ellos por el obispo de la diócesis católica en la cual la casa original de la FSPX estaba situada. En cuanto a él le tocaba, obtener o no obtener esa aprobación significaba toda la diferencia entre fundar una Congregación de la Iglesia Católica y lanzar una asociación privada por su propia cuenta. Él tenía todo el interés en fundar una Congregación católica, mucho menos interés en lanzar una institución privada.

De hecho, cuando fue a ver al Obispo Charrière de la Diócesis de Ginebra, Lausana y Friburgo para obtener esa aprobación, no tenía esperanzas. La Revolución Conciliar estaba por entonces bien en camino y era directamente contraria a lo que los Estatutos proyectaban. Sin embargo, providencialmente el Obispo Charrière dio su aprobación, tal vez porque sabía que se iba a jubilar pronto después. De cualquier manera, Mons. Lefebvre volvió alborozado a Ecône y un reporte incluso habla de él flameando triunfalmente en el aire los Estatutos nuevamente aprobados.

Lo que eso significó para él fue que de allí en más, en cuanto a él le concernía, él tenía la autoridad de la Iglesia para construir una Congregación de la Iglesia. Si bien unos años más tarde, Roma iba a intentar retirarle tal autorización, este intento era intrínsecamente tan injusto según la ley de la Iglesia, que Mons. Lefebvre nunca dudó en continuar ejerciendo dentro de la FSPX toda la autoridad de un Superior clásico de una Congregación. Esa autoridad católica clásica tiene tal poder que enganchándola con arneses al carro de mentiras, los Papas Conciliares han sido capaces de destruir virtualmente la Iglesia Universal y, por estar siendo enganchado con arneses a un acuerdo práctico con Roma Conciliar, está ahora virtualmente destruyendo la FSPX. Por otro lado, sobre sacerdotes, monjas y laicos fuera de la FSPX, el Arzobispo Lefebvre nunca se arrogó a sí mismo ninguna autoridad otra que la de padre, consejero y amigo.

Comentario: En principio: ¿Era aquella situación por la que atravesaba Monseñor Lefebvre la misma situación por la que atravesamos hoy? De ninguna manera. El Obispo Charrière ERA INDUDABLEMENTE OBISPO.

Pero entonces… ¿Acaso Monseñor Williamson CREE que los Obispos actuales LO SON?

¿Acaso CREE Monseñor Williamson que los Obispos actuales (algunos de ellos, por lo menos) ejercen LEGÍTIMAMENTE SU OFICIO DE ORDINARIOS?

¿Eso es lo que cree Monseñor Williamson?

Parece decir que el no puede fundar una Congregación porque para ello necesitaría de la aprobación de un obispo CONCILIAR…

¿Parece decirlo? No, no… LO DICE ABIERTAMENTE.

Todo esto no hace más que añadir mayor confusión a la situación actual.

Esta manera de pensar es LA MISMA DE MONSEÑOR FELLAY.

Parece ignorar que la posición de Monseñor Lefebvre fue evolucionado respecto de Roma y de las autoridades romanas, todo lo cual llevó finalmente a las Consagraciones Episcopales. Monseñor Lefebvre no llegó de un día para otro a esa posición. En cambio, Monseñor Williamson desanda ese camino en unas pocas palabras de su Eleison 307.

En pocas palabras contradice lo firmado por todos los Superiores de la FSSPX en julio de 1988: «Nosotros jamás quisimos pertenecer a ese sistema que se califica a sí mismo de Iglesia Conciliar y se define por el Novus Ordo Missæ, el ecumenismo indiferentista y la laicización de toda la sociedad. Sí, nosotros no tenemos ninguna parte, nullam partem habemus, con el panteón de las religiones de Asís; nuestra propia excomunión por un decreto de Vuestra Eminencia o de otro dicasterio no sería más que la prueba irrefutable. No pedimos nada mejor que el ser declarados ex communione del espíritu adúltero que sopla en la Iglesia desde hace veinticinco años; excluidos de la comunión impía con los infieles».

Ahora se entiende claramente la famosa frasecita del Comentario Eleison 165, del 11 de septiembre de 2010: «… para obtener de Roma la preciada regularización que solamente Roma tiene la autoridad de otorgar…»

Además, al no recordar que Monseñor Lefebvre con el correr del tiempo fue modificando su punto de vista respecto de las autoridades Romanas, Monseñor Williamson se traslada inevitablemente a los obispos conciliares, ya que estos últimos se encuentran subordinados y en directa línea de trabajo con las directivas que emanan de la Roma Anticristo.

Monseñor Lefebvre llegó a declarar que «Roma ha perdido la fe». Monseñor Lefebvre llegó a plantear con mucha seriedad que era llegado el tiempo de comenzar a hablar con los fieles acerca de la posibilidad concreta de que ya no hubiera Papa en Roma.

Vaya retroceso el del Obispo Williamson… ¿Acaso él también, como Monseñor Fellay, está en la frenética búsqueda de su PROPIO Y PERSONAL PUNTO DE PARTIDA?

Ahora resulta que, no entendemos bien por cuáles razones que inspiran a Mons. Williamson, debemos pedirle PERMISOS a los heréticos obispos conciliares. Esto raya con la más absoluta locura o estupidez, elija el lector.

Estas expresiones de Monseñor Williamson parecen más bien orientadas a DETONAR lo poco que queda de la obra de la TRADICIÓN. Muy lejos de significar una ayuda, una tabla de salvación (en términos de naufragio… y vaya si esto lo es), más bien el Obispo Williamson acaba de arrojar un salvavidas, sí, pero DE PLOMO.

Las razones por las que en realidad carece de sentido fundar una congregación nueva, en reemplazo de la malograda FSSPX, son otras. Si Monseñor Williamson quiere o no quiere reconocerlas, es otra cuestión.

Las razones son de dimensiones apocalípticas; y es precisamente por negar esas razones o por interpretarlas de un cierto modo, a nuestro juicio equivocado por contradecir a los mejores interpretes del texto sagrado, que Monseñor Williamson acaba de cometer un gravísimo error. Porque el ELEISON 307 es un completo error y las consecuencias de este error se siguen inmediatamente a la vista de toda persona razonante.

Suponemos que nadie dirá que este artículo tan crítico con que abordamos el ELEISON 307 se escapa por tangentes apocalípticas a falta de respuestas más «concretas» en el sentido prosaico que se le puede dar al término «concreto». Por si ocurriese, recordamos que en reiteradas oportunidades Mons. Williamson ha demostrado cuanta importancia le otorga a ciertas «apariciones», sin mencionar más que de pasada la recomendada (por él) lectura de la pseudo-mística María Valtorta. Además en este mismo ELEISON 307 se despacha un poco más adelante con una reflexión de indudable sentido apocalíptico donde dice lo siguiente: «La FSPX es con seguridad la última en la línea de las Congregaciones clásicas a poder ser fundada, al menos hasta después del Castigo».

Pero, los días del Obispo Charrière hace tiempo que se fueron. ¿Cuántos obispos sanos quedan en la Iglesia oficial? Y, ¿cómo podría cualquiera de ellos aprobar hoy estatutos Tradicionales y anti-Conciliares? Es como si justo después que el Arzobispo se escapó del castillo católico con los Estatutos católicos en su mano, el portón levadizo Conciliar de hierro se desplomó detrás de él. «Ellos están mentalmente enfermos, pero tienen la autoridad», dijo uno de los cuatro teólogos de la FSPX acerca de los teólogos Romanos después de las Discusiones doctrinales de 2009-2011. La FSPX es con seguridad la última en la línea de las Congregaciones clásicas a poder ser fundada, al menos hasta después del Castigo. Y duró solo unos cuarenta años.

Comentario: Uno de los cuatro teólogos de la FSSPX decía, «Ellos están mentalmente enfermos pero tienen la autoridad». He aquí el zafarrancho. De esta posición se siguen los tremendos errores y las tremendas consecuencias que hoy padece TODA la Tradición y que llevan a Monseñor Williamson a las conclusiones que saca en su último ELEISON… Los cuatro teólogos de la FSSPX, que en el marco de los diálogos que procuraban encontrar las bases para un ACUERDO DOCTRINAL que permitiera un ACUERDO PRÁCTICO, fueron apoyados en su tarea TAMBIÉN por el Obispo Richard Williamson. No lo olvidemos. Como tampoco debemos olvidar que aceptó y defendió el Motu Proprio de Benedicto XVI, así como pidió, aceptó y agradeció el levantamiento de la excomuniones. Cuando emitía estos agradecimientos y aceptaba y defendía el Motu Proprio, y el levantamiento de las «excomuniones» . En aquel momento, ¿pensaría acaso que el Castigo se encontraba en un muy, muy, muy lejano futuro?. La pregunta no es ociosa: si de las autoridades romanas provenían esas cosas y eran tan buenas como para defenderlas y agradecer por ellas… no todo estaba tan mal en la Roma Anticristo.

Es por eso que, en mi opinión, «Lo que no puede ser curado debe ser soportado». Y es por eso que, en este momento, me contemplo como siendo no más que padre, consejero y amigo para cualesquiera almas que llamen al liderazgo y apoyo de un obispo. Incluso esa es tarea suficiente. Que Dios esté con todos nosotros. Kyrie eleison.

Comentario:
«Lo que no puede ser curado debe ser soportado». Efectivamente, deberemos soportar que NO HAYA NINGÚN OBISPO SANO. Eso incluye a Monseñor Williamson. A menos que por «sano» se entienda a un Obispo de la Tradición que todavía cree que necesita autorizaciones y delegaciones de algún tipo que debieran se obtenidas de parte de las autoridades Romanas Apostatas para proseguir con su oficio y su trabajo apostólico.

Porque ES ESO precisamente lo que acaba de decir Monseñor Williamson en su último ELEISON…

En tal sentido, deseamos que este Eleison 307, que es el último, sea REALMENTE «EL ULTIMO», para bien de la Tradición y por tanto de la Iglesia Católica y consecuentemente de las almas. Ni más, ni menos.

Cierra el Obispo Williamson «contemplándose» y ofreciéndose como:

«no más que un padre»… Es el síndrome de «decimejorge»… ¡HUYAMOS!… Es como una peste…

«Consejero»… Consejero de semejantes «CONSEJOS»…, mejor me aconsejo yo mismo.

«Amigo»… Plegaria: «Señor, guárdame de mis amigos, que de mis enemigos me cuido solo».