Mons. Williamson ha hablado…
MAYOR CLARIDAD EN LA FALSA RESISTENCIA
«Amigos, romanos, paisanos, prestadme vuestros oídos,
he venido a enterrar a Cesar, no a aplastarlo»
William Shakespeare, «Julio Cesar»; discurso de Marco Antonio.
«La ironía a menudo requiere de un cierto bagaje cultural»
Leído por ahí…
«No voy en tren, voy en avión…»
Charly Garcia
A las acostumbradas imposturas de algunos de los sacerdotes de la Falsa Resistencia (como la que hemos comentado del Padre Trincado que, con el burdo panegírico del «nacimiento» de la falsa resistencia realizado en Chihuahua, no ha hecho más que el ridículo)…; a su habitual no considerar como patrañas lo ocurrido dentro de la FSSPX desde los tiempos de la creación del GREC…; a las consecuencias de que la cúpula de Menzingen esté en manos de acuerdistas liberales, deformados doctrinalmente…; a la injerencia de un sionista, como Maximilian Krah, en el manejo de los dineros y en el asesoramiento jurídico de la FSSPX…; a un largo etcétera de turbios asuntos…, se ha sumado ahora una más de Monseñor Williamson.
Los sacerdotes y fieles de la Falsa Resistencia difícilmente podrán eludir relacionar todas aquellas cuestiones con el inexplicable hecho del liderazgo ejercido por Mons. Williamson sobre ese mismo sector.
Mons. Williamson es uno de los CUATRO obispos a los cuales se refería Mons. Fellay cuando dijo seriamente: «ustedes se reirán, pero en el fondo los cuatro obispos estamos de acuerdo».
Pero nadie, que sepamos, se ha detenido para hacerse la siguiente pregunta:
De ser cierto que los cuatro obispos estuvieran de acuerdo, ¿En qué cosas, o en cuántas y cuáles cosas, es que estarían de acuerdo?
Pues bien.
Quien escribe no sabe en cuántas. Mucho menos si ese «estar de acuerdo» entre los CUATRO obispos pudiera ser completo, o si pudiera tener y contener matices.
Salvo… en un aspecto, un punto, que resulta ser crucial, definitivo e inocultable.
Sabemos que mientras Mons. Fellay saldría corriendo para ir a Roma, Mons. Williamson (parafraseando a conocido y parecidamente rocambolesco cantautor argentino) iría en avión.
Es un matiz; y ciertamente representa una diferencia; claro que en favor de Mons. Fellay, o, mejor expresado, en detrimento de Mons. Williamson.
Como expresa el dicho popular: «aquí, el no corre, vuela…»
Quizás, la explicación podamos encontrarla en que Mons. Fellay suele estar bastante más cerca de Roma, no sólo ideológicamente hablando, sino también físicamente; en tanto que Mons. Williamson se ha vuelto bastante más viajero y, ciertamente, exigirle que vaya corriendo o caminando, puede parecer una falta de consideración de parte nuestra…, a sus años.
Por mi parte, ni piensen que pudiera llegar a ofrecerle el globo aerostático como medio de transporte.
Sin embargo, Mons. Williamson y Mons. Fellay están en perfecta comunión de ideas respecto del «Pontificado» de Jorge Mario Bergoglio. Ambos creen exactamente lo mismo.
Es más, hasta me atrevo a decir que en algún momento pareció más crítico para con «Francis» Mons. Fellay que el obispo inglés.
El gallardo (¿o gatuno?) líder de la falsa resistencia (más evidentemente falsa que nunca), no solamente continua diciendo que él (Mons. Williamson) no tiene autoridad ni jurisdicción, sino que además sostiene que ambas (autoridad y jurisdicción) están en manos de BERGOGLIO y sus secuaces y, como cereza arriba de la torta, admite que iría a subordinarse al hereje contumaz, que gobierna desde Santa Marta, apenitas recibiera una mínima señal amistosa de su parte.
Algo así como si San Atanasio hubiera ido a visitar (tardíamente, claro…, por falta de aviones) a ARRIO luego de reconocerle un poder LEGITIMO en la Iglesia de Cristo.
Si mal no recuerdo, el Santo Patriarca afirmaba que «Ellos tienen los templos, nosotros tenemos la Fe», con lo cual se me ocurre que ALGO MUY IMPORTANTE quería significar.
¿Que no es lo mismo?
¡Ah!… claro que no; no es lo mismo el ARRIANISMO que el MODERNISMO, que desde hace décadas campea en Roma.
Por supuesto que no son lo mismo. El MODERNISMO es infinitamente peor y más perverso.
Y si el ARRIANISMO ponía a quienes lo profesaban FUERA DE LA IGLESIA, mucho más, muchísimo más el MODERNISMO, del cual San Pio X afirmaba que es la cloaca que resume a todas las herejías, incluido el credo arriano.
Se trata entonces, tan solo de un ejercicio de lógica, y de la más elemental.
Ante nosotros tenemos a las autoridades de la Iglesia Conciliar, a la cual no es posible llamar CATÓLICA por la sencilla razón de que profesa una fe que no es CATÓLICA. Ya lo dijo Bergoglio: «Dios no es católico», que puede entenderse del modo que a cada uno le plazca, como casi todas las cosas que dice Bergoglio, salvo aquellas que manifiesta con total claridad, y esas son las que afirman la predominancia del Poder Judío para el cual trabaja el sexto «papa» conciliar.
Uno puede empeñarse en creer lo que quiera y llegar a creérselo, nomás, pero eso no cambia las cosas, porque las cosas son lo que son por más que no queramos que lo sean. En fin…
Los Monseñores Fellay y Williamson, dos de los cuatro que «en el fondo» están de acuerdo, lo están en más cosas de las que ellos mismos están dispuestos a admitir, pero por ahora nos quedamos con estas dos:
a) Ambos creen que Bergoglio ES PAPA y que la Iglesia Conciliar es la Iglesia VISIBLE y que por lo tanto es la IGLESIA CATÓLICA.
b) Ambos irían prestamente a arrodillarse frente al FALSO PAPA FRANCISCO (falso en razón de una buena cantidad de cuestiones, entre las cuales se encuentran sus constantes macaneos mediáticos, sensibleros, chuscos e impropios de la investidura papal; sus repetidas herejías surgidas de su «pontificia» bocaza; sus repetidos actos o hechos heréticos, sus innumerables heterodoxias dichas, escritas, actuadas, etc.).
Por lo tanto, y más allá de la discusión referente a la vacancia o no de la sede romana, nosotros sostenemos que:
Visto lo antedicho, más todo lo otro que hemos visto anteriormente, damos por corroborado y probado indubitablemente que ambos Monseñores le hacen el juego a la Sinagoga de Satanás, que es la que está detrás de Bergoglio, como lo estuvo de todos los «papas» conciliares.
Mons. Fellay es un liberal moderado, atormentado por el terrible complejo de sentirse excomulgado, o por lo menos en una «no perfecta comunión» con quien él considera un verdadero Papa.
Mons. Williamson…, por su parte, como proviene del anglicanismo y ha sido ciertamente un liberal (él mismo admite estas dos últimas cosas), no tiene tanto problema con el hecho de estar separado de lo que él también cree que es la Iglesia y el verdadero Papa. Sin embargo, su posición es doblemente más peligrosa que la de Mons. Fellay, precisamente por eso mismo, y más ambigua además.
En fin. Que esto es un lio. Que los dos Obispos, mejor dicho los CUATRO, no brindan la menor garantía en lo que hace a la defensa de la fe verdadera.
Párrafo aparte para los seguidores de Mons. Williamson…
Comprenderán que estamos casi obligados a extendernos sobre este tema en relación con la Falsa Resistencia; y es precisamente porque adoptaron ese nombre «RESISTENCIA», siguiendo un FALSO RESISTENTE (Mons. Williamson), y porque entre ellos los hay que de RESISTENTES tienen poco y nada, como ya hemos dicho anteriormente.
Pero ahora vamos a decir que, dado que Mons. Williamson ha manifestado con todas las palabras y sin dejar el menor resquicio para la duda que para él BERGOGLIO es Papa, y que, como tal, es quien ejerce el poder de ATAR y DESATAR en la Iglesia de Cristo, y que de él (un modernista corrompido y corruptor de la fe y de las almas) provendría (según Mons. Williamson, obviamente) TODA JURISDICCIÓN, los que militan en las filas de la FALSA RESISTENCIA (que como ya dijimos demuestra ser MÁS FALSA QUE NUNCA) ya pueden optar por dos (y sólo DOS) caminos:
a) Continuar siguiendo al obispo inglés en su camino de apostasía, y subordinándose a los apóstatas romanos que destruyen la fe.
b) Separarse, sin hesitar un momento, de la FALSA RESISTENCIA y de los liderazgos de estos obispos y sacerdotes DESVIADOS.
Claro que tienen una opción c).
Es la que, seguramente, habrán de adoptar los que ya conocemos, y de los cuales nos hemos ocupado recientemente. Es como si se tratase de un camino alternativo…
Hay medicina y terapias alternativas, arquitectura alternativa, música alternativa, rutas alternativas, etc. etc…; y también parece que algunos sacerdotes, medio amañados y amigos de las posiciones «moderadas» que adrede confunden con posiciones PRUDENCIALES, son proclives a adoptar esas posiciones ALTERNATIVAS.
Son los curas que hacen «política»; los que practican una suerte de «proselitismo» mal entendido, ya que no buscan hacer verdaderos PROSÉLITOS sino ALIADOS y SIMPATIZANTES.
Acaso será porque procuran no «perder feligreses»… y se contentan al verse rodeados de un buen número de «simpatizantes» o «aliados».
Deberían saber que los ALIADOS sólo lo son circunstancialmente y por cuestiones coyunturales, pero no responden a los mismos intereses de fondo ni obran poseídos del mismo amor, ni de la misma fe, ni tienen las mismas esperanzas.
Los SIMPATIZANTES quedan bien, digamos, en una cancha de futbol, pero muy mal, en cuestiones de Fe y de Religión.
De manera que, apreciados «resistentes» agrupados en la Falsa Resistencia, va siendo hora de que den una señal clara y se aparten de los sinuosos caminos de los obispos y sacerdotes que se mueven en esa ancha franja de ambigüedades y posiciones moderadas.
Es fácil execrar a Mons. Fellay por su evidente traición para con la Obra de la Tradición; y nos parece que ya es igual de fácil hacer lo mismo con Mons. Williamson, que ha expresado esta «burrada» que quizás a más de uno le faltaba escuchar expresamente manifestada por ese prelado:
Si…, si…, si… por algún milagro, el Papa Francisco me llamase la semana próxima y me dijese:
—Excelencia, usted y yo hemos tenido nuestras divergencias, pero en este momento lo autorizo a fundar una sociedad. Siga usted adelante por el bien de la Iglesia.
—Santo Padre, ¿puede, usted, poner esto por escrito? ¿Le molestaría que vaya a Roma a buscar el documento con su firma?
—Pero, por supuesto.
—Muy bien … entonces, yo estaría en el próximo avión hacia Roma. ¡Yo estaría en el próximo avión hacia Roma!
Yo no tengo la autoridad.
(Monseñor Williamson, Conferencia en Post Falls, Idaho, USA).
Va siendo hora que los fieles se expresen con claridad y que exijan a los sacerdotes definiciones bien claras respecto de las cuestiones a las que hacemos referencia en este artículo, en especial respecto de estas declaraciones de Mons. Williamson.
Es hora de que se definan. (¿ilusos nosotros?… tal vez)
Son los fieles y solamente los fieles firmemente adheridos a la verdadera fe los que pueden hacer que sacerdotes timoratos y excesivamente «prudentes» asuman la posición doctrinal y práctica que reclama el momento histórico y meta-histórico que por Gracia de Dios nos toca presenciar.
¿Habrá algunos fieles capaces de comprender y actuar, dentro de lo que llamamos «falsa resistencia»?
