La Masonería Italiana apoya al Papa BERGOGLIO
Tomado de TIA
Al dīa siguiente de la elección del Papa Francisco, el Gran Oriente de Italia (GOI) que representa a la Masonería en ese país, publicó un comunicado alabando su primeras medidas igualitarias, el día de su elección. El documento hizo públicas las expectativas dei los masones de que el nuevo Papa conduzca a la Iglesia por la vía democrática que la Masonería desea.
Esto fue registrado en el sitio Web oficial del GOI. La fotografía de la página web puede verse arriba con la parte referente a Francisco agrandada.
Traducción del Comunicado de 14 de Marzo de 2013
El Gran Maestro Raffi: “Con el PAPA Francisco ya nada será igual a lo que era antes. Ha sido una clara apuesta de fraternidad para una Iglesia de diålogo, no contaminada por la lógica y las tentaciones del poder temporal.
“Un hombre de los pobres lejos de la Curia. Fraternidad y deseo de diálogo, fueron sus primeras palabras. Quizás nada en la Iglesia será como antes. Nuestra esperanza es que el pontificado de Francisco, el papa que “viene del fin del mundo” marque el retorno de la. “Iglesia-Mundo” en lugar de la “Iglesia-Institución”, que promueva el diálogo con el mundo contemporáneo, con los creyentes y los no-creyentes, siguiendo los principios del Vaticano II. Éste fue el comentario de Gustavo Raffi, Gran Maestro. Del Gran Oriente de Italia, al comienzo del pontificado de Francisco, en el mundo Jorge Mario Bergoglio.
El Jesuita está próximo a los últimos de la historia, continúa Raffi, ” tiene la gran oportunidad de mostrar al mundo la faz de una Iglesia que debe protagonizar el anuncio de una nueva humanidad, no la carga de una Institucón encerrada en sí misma defendiendo sus privilegios. Bergoglio conoce el mundo real y recordará las lecciones de uno de sus teólogos favoritos, Romano Guardini, para quien la verdad del amor no puede ser detenida.
“la sencilla cruz que lleva en su blanca sotana,” concluye el Gran Maestro del Palacio Giustiniani, “nos hace esperar que una Iglesia del pueblo redescubra su capacidad de diálogo con todos los hombres de buena voluntad y con la Masonería, que, como nos enseña la experiencia en Latinamérica, trabaja por el bien y el progreso de la Humanidad, como se ,vio en Bolívar, Allende y José Martí, para nombrar sólo unos pocos. Éste es el “humo blanco” que esperamos de la Iglesia de nuestro tiempo.
